¿Alguna vez haz pensado que decir GRACIAS es suficiente?... Pregúntatelo.
Y si tu respuesta es sí, aún estás por aprender de lo que se trata la vida y si tu respuesta es lo contrario, estamos en la misma onda, sea el acontecimiento que sea que haya pasado en tu vida hizo que te quedes con esa gran lección.
Con esa pregunta al inicio de mi post solo quería profundizar cuan importante es para cada uno de nosotros el hecho de ser agradecido y con eso me refiero no solo a la palabra sino a las acciones que hacen que demuestres tu gratitud con tus seres amados, con la vida, contigo mismo, con Dios. No se trata de que devuelvas un favor, no se trata de rezar un padrenuestro de agradecimiento, tampoco de hacer una buena acción al prójimo. El hecho de ser agradecido va mucho más allá de eso, es trascendental porque se siente en el corazón y se siente todos los días si realmente sabes apreciar cada instante de tu preciosa vida.
Una vez, dos personas que quiero mucho, me dijeron que la vida se trataba de una cadena de favores. De dar desinteresadamente y de recibir inesperadamente. En ese momento, en el que me "salvaban" la vida haciéndome un favor inimaginable tenía una sensación de no saber que hacer para agradecer tal gesto. Sin embargo más adelante, en el ínterin de toda la odisea con mi cáncer pude entender realmente esa sensación con la que vivo todos los días, cada noche al acostarme y cada mañana al levantarme. Pueden haber realmente miles de razones por las que vivo agradecida con todo lo que me rodea, tal ves la mas importante es la de saber que tengo la oportunidad de vivir pese a estar atravesando una enfermedad como la mía. Por tener ese chance que otros no tienen, pero mmmm... como explicar ese gozo que siente el alma cuando vives agradecido con todo y todos, con cada acontecer de tu vida, con esa sensación de que cada pieza encajó donde tenía que encajar; bien dicen que la capacidad de gratitud que tienes con los tuyos aumenta tu capacidad de ser feliz. Y eso me pasa mí. Seria de nunca acabar el listón de personas con las que vivo agradecida, entre ellos mi madre, mi familia, mis amigos e incluso hasta gente desconocida que sin conocerte y sin saber que hay detrás de tu sonrisa ó de tu tristeza te dan la mano. ¿Como no decir que soy una afortunada, no? Superando esquemas soy más que eso, yo soy una persona bendecida.
Por las noches siempre que hablo con Dios le pido tranquilidad y paciencia para afrontar mi vida, oro para que mi corazón se mantenga limpio de cualquier sentimiento malo pero sobretodo le agradezco con mucho fervor que me permita tan solo respirar y sentirme mejor cada día. Y hay algo que debo confesar, ó comentar como anécdota tal ves.
Antes -es decir, el año pasado más ó menos- cuando aún vivía atemorizada y en una especie de shock emocional por todo lo acontecido, sentía que en mi vida todo se veía nublado, tal ves tantas interrogantes me hacían dudar de que realmente no estaba sola. Pero amigos, Dios es grande, me han pasado cosas que de verdad solo pueden tener explicación divina, por eso en algún momento le pedí a Dios que no me permita alejarme de Él y de su amor infinito y bueno heme aquí más cerca que nunca e interpretando todos sus designios. Créanme que Dios nos envía todo, desde las personas que pasan por nuestras vidas -aquellas que se van ó que se quedan-, los momentos tristes y alegres, las derrotas y victorias, las perdidas y el éxito y a cambio Él nunca pide nada, solo busca brindarnos esa oportunidad para ser agradecidos. Queda en nosotros profundizarla ó no. Para explicarme mejor... piensen en algún momento en que -por ejemplo- hayan dado una ayuda (no de tipo material) sino espiritual ó tal ves algún gesto que hayan hecho de corazón... y recuerden si no han sentido que les han devuelto (no necesariamente la misma persona) aquel gesto, aquella ayuda, aquella compañía. Estoy segura que sí, porque así como el mundo es redondo y gira sin darnos cuenta, nosotros tiramos el dado pero siempre al siguiente le toca el otro turno. Verás que el mundo, efectivamente, si se trata de una cadena de favores... hoy por ti, mañana por mí. Y sí aún no lo recibes de vuelta, en cualquier momento vas a sentirlo y sería lindo que pienses que fue mano de Dios quién te envía aquella situación para demostrarte que el agradecimiento lo debes tener en cada circunstancia, no importa cuan difícil parezca el seguir despertando cada día. Créeme que valdrá la pena!
Creo que este post tuvo la palabra agradecido por todas partes jajaja y bueno ese era el fin. Expresar que vivo de tal forma y por eso soy feliz, no importa cuanto haya atravesado siento que lo ganado es más que lo perdido. Esta fue la primera lección de vida de muchas que tengo por ahi guardadas en mi corazoncillo y que realmente hace tiempo quería contarla por aqui pero siempre debo hallar el momento preciso para hacerlo y esta etapa de mi vida en la que prácticamente vengo renaciendo lo ameritaba.
Piénsenlo un poco y practiquen lo relativo a la cadena de favores. Siempre seamos gratos con todo lo que está a nuestro alrededor. No olvidar queridos, queridas: la vida es una solo y no debemos esperar que esta nos golpee para recién valorar lo que tenemos :).
